Un soldado británico rescata a un cachorro de una región devastada por la guerra y le da un hogar permanente lleno de amor y compañía.

El soldado británico Sean Laidlaw estaba de servicio en Siria, un país devastado por la guerra, cuando oyó un llanto que provenía de los e...

El soldado británico Sean Laidlaw estaba de servicio en Siria, un país devastado por la guerra, cuando oyó un llanto que provenía de los escombros. Al principio pensó que se trataba de un niño que gritaba pidiendo ayuda, por lo que se apresuró a ver qué podía hacer.

Cuando retiró los escombros, se dio cuenta de que en realidad era un adorable cachorrito. La llamó Barrie, ¡ya que pensó que era un niño! Pero el nombre se le quedó, y la pequeña Barrie se convirtió en el alma del campamento de soldados en Siria.

Saludaba a las tropas cuando regresaban de un día difícil e incluso acompañaba a Sean en algunas patrullas. En tiempos tan tristes y difíciles, era increíble saber que se había podido desarrollar una relación tan conmovedora.

Sean se fue a casa de permiso por un par de semanas y tuvo que dejar a Barrie atrás. Pero cuando estaba a punto de regresar, la situación en Siria empeoró aún más y no le permitieron viajar. Devastado, se dio cuenta de que tal vez no pudiera reunirse con Barrie a menos que tomara alguna medida drástica.

Se puso en contacto con una organización benéfica llamada War Paws, que ayudó a Sean a sacar a Barrie de Siria de forma segura y llevarla a Irak. Pero no fue fácil trasladar a Barrie de vuelta al Reino Unido, como Sean descubriría rápidamente. La preciosa perrita tuvo que pasar tres meses en cuarentena, antes de poder finalmente tomar un vuelo a Europa.

Sean condujo desde el Reino Unido hasta Francia para recoger a Barrie en el aeropuerto de París, pero le preocupaba que ella no reconociera al soldado que la había salvado. Después de todo, habían pasado varios meses sin verse y, de repente, ella se vio empujada a un nuevo entorno.

Pero Sean se sintió aliviado rápidamente cuando Barrie se encariñó con él casi instantáneamente, mientras se daba la vuelta en el estacionamiento y dejaba que él le acariciara la barriga.

Como Sean admite en el vídeo, cree que Barrie hizo más por él que él por ella. Su amor y afecto contribuyeron a su recuperación e hicieron maravillas por las demás tropas estacionadas lejos de sus seres queridos.